Como comentaba en la entrada anterior uno de los puntos clave en la gestión del riesgo son los ajustes. Dentro de las Iron Condor dos son los tipos de ajuste más usados: hacer rolling y añadir longs.
Los ajustes “rolling” a su vez se pueden dividir en ofensivos y defensivos.
Un rolling defensivo se basa en cerrar la posición del lado atacado (total o parcialmente) y volver a abrir la misma posición más alejada. Este tipo de ajuste supone un coste ya que tenemos que pagar al mercado para hacerlo.
Para subvencionar parte de este coste extra podemos hacer un rolling ofensivo, que es justamente lo contrario, acercar la posición del lado no atacado para generar crédito. Hay que tener en cuenta que al acercar la posición a la cotización del subyacente estoy incrementando el riesgo.
El segundo tipo de ajuste consite en añadir longs, el objetivo de este ajuste es neutralizar deltas de la posición.
Para hacer este ajuste podemos utilizar tanto longs como verticales de débito. Si el mercado amenaza la short call podemos añadir una long call o una bull call, mientras que si el mercado se mueve hacia abajo meteremos una long put o una bear put.
Con este ajuste lo que buscamos es reducir entre un 50% y un 75% de la delta global de la posición sin neutralizar totalmente theta.